Quiero que te vayas, que desaparezcas así de repente, no quiero sufrir más. Si te fueras, hubiera en mi vida una etapa muy díficil, pero la superaría, al saber que tu nunca volverías, y hasta puede ser que, despues de un tiempo, volviera a ser feliz, como cuando tu estabas bien conmigo, sin todas esas mierdas por las que pasamos. Tal vez. O tal vez no, puede que no fuera capaz de olvidarte nunca, esa opción la veo bastante posible, ya que te has marcado demasiado en mi corazón, en mi estúpido corazón que, ignorante, vivia de ilusiones, aunque en el fondo supiera que esto nunca funcionaría, que no estabamos hechos el uno al otro, cada uno demasiado diferente, dicen que los polos opuestos se atraen, pero en nuestro caso era distinto, eramos DEMASIADO diferentes. Yo demasiado inocente como para darme cuenta de lo que hacias, o tal vez no inocente, sino mejor dicho, IGNORANTE, no quería verlo, mi corazón no lo aceptaba, por eso hacia como que no pasaba nada, mientras que por dentro estaba sufriendo más que nunca. A ti esto, te daba más que igual, eso estaba claro. Tal vez, en parte, fuera culpa mia, te consentía demasiado. Fallo mio. Una vez escuché por ahi que 8 de cada 10 lágrimas derramadas preferirían no haberte conocido, que frase más verdadera, ché. Ahi esta la cosa. Gracias, ahora al haberte conocido y haber probado tus labios, todos los otros besos que me den, nunca serán suficientes, nunca estarán a tu altura, otra cosa que me has jodido en mi vida, eres demasiado perfecto, ninguna se puede enfadar contigo, y mucho menos yo, que eres como mi droga, un día sin verte, se me hace eterno, insoportable. Un día sin hablar contigo, es una tortura. Por eso te pido, que desaparezcas, si se que no vas a volver, puede que al final me convenza a mi misma de que no tengo que esperarte nunca más, que todo acabó. Pero eso si, si te vas, no vuelvas, porque entonces todos mis esfuerzos por olvidarte se irían a la mierda. Ya no habría vuelta atrás, me sería imposible olvidarte. Asi que, supongo que adios, y te vas; o hola, y te quedas, pero para siempre.