Seguidores♥

miércoles, 26 de diciembre de 2012

Pienso que... que cuando todo ha llegado a su fin, todo se repite en flashes, ¿sabes? Es como un caleidoscopio de recuerdos, pero todo regresa. Excepto él. Pienso que parte de mí sabía al segundo que lo vi que ésto pasaría. En realidad, no es algo que él haya dicho, o hecho. Era la sensación que ésto envolvía. Y... lo más desconcertante es que, no sé si volveré a sentirme así otra vez. Aún así, no sé si debería. Sabía que su mundo se movía de manera rápida y que brillaba cual sol. Pero pensé, ¿Cómo puede el diablo empujarte a los brazos de alguien que luce... lo más parecido a un ángel cuando te sonríe? Quizá él lo sabía, cuando me vio. Supongo que perdí mi balance. Pienso que la peor parte de todo esto no fue perderlo a él, sino perderme a mí.

sábado, 1 de diciembre de 2012

Se desean pero no se pueden tener. Y es que a veces el destino es el que reparte las cartas y juega sucio.
Cuando su piel roza la de ella, es como si fuera electricidad, es como si fuera fuego, quema, y a la vez es como si fuera la cosa más suave y dulce del mundo. Si ella pudiera elegir una cosa para tener siempre, serían los dedos de él sobre su piel. Acariciándola. Le daría a replay a todas horas, desearía que no parase nunca.
Con cada gesto de esos, cada sonrisa que se dedican, cada gesto que se hacen, cada guiño, cada abrazo, se enamoran más. Él de ella, y ella de él.
Ella desea con todas sus fuerzas decirle que le quiere, que cada sonrisa que le dedica hace que le quiera más, que desearía mandarlo todo a la mierda y estar con él, pero no puede. No puede porque no quiere herir a nadie.
Él desea con todas sus fuerzas poder besarla, poder acariciarla sin que nadie les juzgue, decirle a cada segundo que nunca la perderá, que la querrá siempre, que nunca ha sentido nada tan fuerte por ninguna, que quiere que sea la primera en todo y a la vez la última.
Pero todavía no pueden.
Ella tiene miedo de que él se canse, tiene mucho miedo, dejarle ir sería el peor error que pudiera cometer, pero no puede hacer nada. O si. Pero ella no es tan valiente como para hacer cualquier cosa.
Qué egoistas.
Sus miradas se cruzan a cada segundo, siempre se buscan, y cuando se encuentran sonríen. Es como un imán. No hay otra cosa que deseen más que estar juntos. Y saben que lo estarán. No ahora, porque no se puede, pero lo estarán, en un futuro. Él espera que ese futuro no sea muy lejano, y ella igual. 
Se desean pero no se pueden tener, no todavía.

jueves, 29 de noviembre de 2012

"Nunca voy a ser tu primer beso. Nunca voy a ser tu primer amor, ni tu primer polvo. No fui tu primer San Valentín, ni tu primera pelea, ni tu primer osito, ni tu primera cita. Posiblemente mi madre no sea la primera suegra que odias. Nunca seré la primera persona que te envió un sms de esos que, terminada la relación, vuelves a leer. Nunca he sido nada. Probablemente no voy a ser la primera en nada. Pero hay algo que tengo muy claro, diviértete, porque quiero ser la última."

viernes, 23 de noviembre de 2012

Se pone bien la gorra, coge su skate y con un ágil salto se sienta al lado de su amigo, que lo ha estado contemplando en todo ese tiempo. Se sonríen y se chocan la mano. 
Que máquina eres, ya casi te sale perfecto.
Ya ves tío, una semana más y me podré presentar al concurso de skate. 
Se quedan en silencio, cada uno pensando en sus cosas.
Eh tío, ¿ves a esa chica que está ahí sentada, sola, con un libro sobre sus rodillas, con la mirada perdida y los ojos llorosos?
Sí, ¿qué pasa? ¿la conoces?
Eso creía. 
Parece muy triste.
Lo está.
¿Cómo lo sabes?
Estuvo con un cabrón que la hizo sufrir, y no hay día que esté riendo, ya no sonríe, y si lo hace, es de forma superficial, falsa. 
Joder, pues si que le debía de querer para acabar así de mal...
Sí, pero él no lo sabía, el muy gilipollas parecía tener los ojos tapados, se dio cuenta tarde, cuando ya no había vuelta atrás.
Pues vaya... una chica tan guapa como ella... 
Ya, y lo peor de todo es que ahora él se arrepiente a más no poder, se odia cada vez que la ve, cada vez que ve su cara triste, le entran ganas de correr hacia ella, abrazarla y susurrarle que la ama, que se arrepiente de lo mal que la trató, de lo poco que hizo para que ella estuviera feliz, del tiempo perdido que no estuvo diciéndole a cada segundo que la quería, que sin ella no puede vivir feliz, que su vida está incompleta si ella no está... te juro que correría hacia ella y le diría lo mucho que la ama...
¿Tío, cómo sabes todo eso?
Porque el cabrón que hizo que su sonrisa se borrara de su cara soy yo. 
¿En serio tío? Joder, pues yo si fuera tú, ni me lo pensaría un minuto más, y más teniéndola ahí tan cerca, iría hacia ella y le diría todo esto que acabas de decir, tío, eres tonto, no sé a qué esperas, no sé a qué le tienes miedo.
Tengo miedo a que ya sea tarde, a que ella esté tan dolida que no me pueda perdonar, a que me odie tanto que ni quiera verme...
¿Pero qué dices loco? ¿me estás diciendo que tienes miedo a que no te perdone, si todavía sufre por ti? ¿a que no quiera verte si todavía va a verte vayas donde vayas? ¿me estás diciendo que crees que ya no te quiere? ¿pero no la ves? Está enamorada de ti, por mucho daño que le hayas hecho, se nota un huevo, y eso que yo no la conozco. 

jueves, 18 de octubre de 2012

Me pierdo en sus ojos. En sus inmensos ojos. Tan profundos que me hacen temblar con sólo mirarle. Que hacen que no pueda concentrarme y que empiece a tartamudear, a sentirme completamente inútil. Su sonrisa y sus ojos hacen que me pierda. Sus ojos que atrapan, cuando conectan con los míos, ninguno de los dos puede dejar de mirarse el uno al otro. Es como un extraño imán. Es extrañamente agradable perderme mirándolos, de verdad. Esos momentos, aunque duran sólo unos minutos, a veces incluso menos, haría lo que fuera por alargarlos infinitamente.

domingo, 7 de octubre de 2012

—¡No llegues tarde!—escuchó decir a su madre antes de dar un portazo y bajar las escaleras de dos en dos hacia la calle. 

Llevaba su chaqueta favorita, esa que no era muy gruesa, pero que la mantenía caliente. Estaba nerviosa, y el ambiente de la calle la ayudó un poco a relajarse.
Fue al parque en el que iba a tener lugar su encuentro. Todavía quedaba un cuarto de hora, aligeró el paso y se acercó al lago que había allí.
Alrededor de este habían esparcidos aleatoriamente bancos, escogió ese que tanto le gustaba, y se sentó.
Se preguntó si él vendría, lo dudaba, las cosas últimamente se habían complicado entre ellos.
Al observar el paisaje se serenó un poco. "Tranquila", se dijo, "todo irá bien".
Su mirada se fijó en el gran árbol que tenía a su derecha, era mágico, parecía hecho de oro, con millones de hojas doradas, todavía presas  de sus ramas. Dos pájaros juguetearon sobre el lago, y una fría brisa removió su larga cabellera, instintivamente rodeó su cuerpo con los brazos, y con sus manos ya frías subió la cremallera de la chaqueta hasta el cuello.
Cada minuto que pasaba, más nerviosa estaba. "No vendrá", decía continuamente, pero deseaba con todas sus fuerzas que pasara lo contrario ya que aquel encuentro, el hecho de que él fuera, decidiría su futuro.
Otra vez ese aire frío hizo que unas cuantas hojas doradas, ya libres, volaran en todas direcciones, formando parte de la alfombra de oro que se iba formando poco a poco en el parque.
Se acabaron los días calurosos de verano, ese Sol abrasador. "Llegó otoño, y con él, la tristeza". Cada vez estaba más segura de que aquel otoño sin él iba a ser insoportable. Miró su reloj, ya había pasado la hora, había quedado con él hace cinco minutos, y sin embargo... "No ha venido". 
Se levantó del banco, descompuesta.
Y a continuación todo pasó muy rápido. Hojas crujiendo. No le dio tiempo ni a girarse, alguien la estaba abrazando por detrás. Y sabía quién era ese alguien. Reconocería ese perfume hasta a kilómetros de distancia. 

Has venido—susurró ella.
Por supuesto, ¿qué te pensabas?—respondió él, todavía abrazándola.
Una sonrisa se dibujó en la cara de la joven.

sábado, 29 de septiembre de 2012

Un fuerte trueno retumbó en toda la casa.
—¿Tienes miedo a las tormentas? —sonrió tiernamente mirándola.
Ella, envuelta en el edredón, asintió con la cabeza. Él se le acercó y la rodeó con sus brazos.
—Sabes que conmigo no tienes que temer a nada, ¿verdad?
—Lo sé, pero es que esos truenos tan potentes, no sé, es tan agresivo, parece que del ruido me vaya a quedar sorda, me asustan, me siento tan débil...—un relámpago iluminó toda la habitación a oscuras.  
—Pues yo pienso lo contrario, ven, quiero enseñarte una cosa— se levantó y le mostró su mano abierta. Ella se la cogió y se levantó llevándose el edredón consigo. Él la llevó hacia la terraza y estuvieron un rato mirando a través de la ventana. Solo otro trueno rompió el silencio que reinaba entre ellos, ella se asustó otra vez, él la acercó hacia sí, y la abrazó fuerte, cuando paró de temblar, abrió la puerta que salía hacia la terraza y salieron fuera. La lluvia caía fuertemente, pero desde donde ellos estaban situados no se mojaban. Esta vez fue ella la primera que le abrazó.
—Observa, observa los relámpagos, y no me digas que no son bonitos, cargados de esa fuerza, tan luminosos... Intenta seguir el recorrido que hace el relámpago, esa pequeña fracción de segundo en la cual está brillando por completo, y luego poco a poco desaparece. Y ahora cuenta los segundos que tarda en producir su rugido, y eso te dirá los kilómetros a los que está de nosotros. Amor, no tienes nada que temer.
En el rostro de la muchacha apareció una ancha sonrisa, y de pronto le entraron ganas de sumergirse en la lluvia.
—Tienes razón... ven, quiero mojarme. —le dijo y en un segundo dejó el edredón en la cama y estaba a su lado de nuevo.
—Si eso es lo que quieres, ¿quién nos impide hacerlo?—dijo él y cuando ella le dio la mano salieron corriendo hacia el lugar de la terraza donde sí llegaba la lluvia. Ella estalló en una carcajada, mientras extendía los brazos y levantaba la cabeza hacia el cielo nocturno. A él también se le contagió la risa, y en un abrir y cerrar de ojos estaba dándole el beso más maravilloso de su vida. Ella le sonrió en los labios, y él le dijo:
—¿Hay algo más a lo que temas, aparte de las tormentas?
—Si, perderte. Eso me da aún más miedo que las tormentas.—entonces él le cogió la cara entre las dos manos y volvió a besarla.
—Dejaré de amarte cuando desaparezcan para siempre todas las estrellas. Mientras tanto, siempre me tendrás a tu lado, al menos que tú me pidas que me vaya, ¿entiendes?—Le dijo él, ella sonrió y le devolvió el beso.

domingo, 23 de septiembre de 2012

"Cuando tus muñecas dejen de sangrar, cuando te duelan los ojos de llorar, sécate las lágrimas princesa, recuerda que te mereces todo lo mejor y más. Esa sonrisa tan preciosa que tienes, no dejes que desaparezca, hazlo por todos aquellos que sí que te quieren, ¿escuchas? No dejes que nada ni mucho menos nadie, vuelva a hacerte sufrir. Recuerda que las heridas sanarán, que los recuerdos se quedarán en eso, recuerdos, y que esa sonrisa que tu dices que no es nada especial, le hace feliz a muchos, aunque no te lo digan. Yo te quiero, princesa."

jueves, 20 de septiembre de 2012


—¿Un chico tan guapo como tú? Tiene que haber una chica especial. Venga, ¿cómo se llama?
—Bueno, hay una chica—responde él, suspirando—. Llevo enamorado de ella desde que tengo uso de razón, pero estoy bastante seguro de que ella no sabía nada de mí hasta la cosecha.
La multitud expresa su simpatía: comprenden lo que es un amor no correspondido.
—¿Tiene a otro?
—No lo sé, aunque les gusta a muchos chicos.
—Entonces te diré lo que tienes que hacer: gana y vuelve a casa. Así no podrá rechazarte, ¿eh? —lo anima Caesar.
—Creo que no funcionaría. Ganar... no ayudará, en mi caso.
—¿Por qué no?—pregunta Caesar, perplejo.
—Porque...—empieza a balbucear Peeta, ruborizándose—. Porque... ella está aquí conmigo.

miércoles, 12 de septiembre de 2012

Puede que ella no te diga a los pocos días de salir contigo un 'te quiero'. Puede que a ella no le guste beber, ni tampoco fumar. Puede que no consigas llevártela a la cama el primer mes. Puede que ella no se pase el día hablándote. Puede que a ella le cueste decir un 'te amo'. Puede que ella no se pase el día entero besándote. Pero también puede que a ella le importes más de lo que parece y que tenga miedo a perderte.

viernes, 10 de agosto de 2012

Sin quererlo sus pies lo llevaron a todos los sitios que había estado con ella, y cuando se dio cuenta, ya era tarde, una ola de recuerdos le pasó por la mente. No lo reconocía, pero realmente esa chica le había marcado.  Si alguien le preguntaba por ella, él, muy chulo le contestaba: 'si, yo me lié con ella; si, yo estuve con ella' y una sonrisa se asomaba por su cara, pero en cuanto esa persona le preguntaba: 'eh tío, ¿te sigue gustando?' él contrariado, rápidamente contestaba: 'qué dices loco, hace ya tiempo que no estoy con ella, ahora estoy de royo con otra', pero en el fondo deseaba que esa otra sólo fuera ella, la única que había hecho sentirle esos escalofríos en cuanto sus tanto adoradas manos recorrían con timidez su cuerpo. No lo quería aceptar, por nada del mundo. Él era... nadie podía hacerle sufrir, y mucho menos enamorarle. Tenía fama de cabrón, pero aún así seguía teniendo a cientos de tías detrás. Unas querían solo un royo de una noche; otras, que él les regalara todas sus noches. Pero ella, su adorada chica, ya no pertenecía ni al primer grupo ni al segundo. Ella ya no le pertenecía en absoluto. Él creía que ella ya le había olvidado, y eso le dolía. "Me comporté fatal con ella, me odio por eso, le hice sufrir, nunca me perdonaré lo que hice, fue un gran error", se decía a veces, pero a pesar de que la amaba, intentaba olvidarse de ella con otras. Cuando las besaba, cerraba fuertemente los ojos e intentaba imaginarse que era ella la que le besaba, pero no lo conseguía, nadie podía igualarse, pero él lo seguía intentando, él seguía rompiendo corazones con tal de arreglar el suyo, con tal de encontrar a alguna que se pareciera al menos un poco a ella. "Soy un puto egoísta, ella había tenido razón cuando me dijo todas esas cosas la última vez que hablamos, claro que tenía razón..., eh, ¿qué te pasa tío? Los tíos no sufren por tías, ¿te acuerdas?", se decía cada vez que empezaba a pensar en sus errores, pero de nada ayudaban esas palabras, él sabía lo que había hecho mal, y ya no había vuelta atrás. 

miércoles, 1 de agosto de 2012

«Un día un joven pasa por una calle, se cruza con una mujer, la mira, se vuelve, sigue adelante. Aquella mujer, que él no conoce, tiene placeres, penas, amores, en los que él no tiene nada que ver. Tampoco él existe para ella, y hasta es posible que, si le dijera algo, ella se burlaría de él. Pasan las semanas, los meses, los años y, de pronto, cuando cada uno ha seguido su destino en un orden diferente, la lógica del azar vuelve a ponerlos al uno frente al otro. Aquella mujer se convierte en amante de aquel hombre y lo ama. ¿Cómo? ¿Por qué? Sus existencias ya forman una sola; apenas se establece la intimidad, les parece que ha existido siempre, y todo lo que precedió se borra de la memoria de los dos amantes. Confesemos que es curioso.»

sábado, 28 de julio de 2012

Esa fue la primera vez que lloró por él, después de tres meses completamente feliz y sin pensar en lo que fueron. Se acabó durmiendo mucho más tarde de lo habitual, llorando por recordar los momentos felices a su lado, se sentía completamente inútil, y se odiaba a sí misma por quererle tanto, por haber dejado que llegara al punto de amarle. 
Ella, la chica que nunca había tenido suerte a la hora del amor; ella, la chica que no duraba más de dos semanas pensando en un mismo chico; ella, la chica que había dejado de creer en el amor, y por una vez que lo había conseguido, esos terribles y felices recuerdos tenían que haber vuelto para atormentarla y recordarle lo muy feliz que había estado junto a ese cabrón. Se durmió sobre la almohada mojada y con la cabeza llena de recuerdos dolorosos.
Definitivamente, ese no era su día.

jueves, 19 de julio de 2012

Yo sé perfectamente cómo tengo que actuar en cualquier momento, tal vez en todos no, pero joder, para eso están los errores, para aprender de ellos una vez cometidos. Si hay algo que me cabrea realmente es que la gente de mi puta edad me tenga que criticar, y decir qué es lo que tengo que hacer, qué es lo correcto sin tener ni puta idea, y eso sólo porque la mayoría de gente lo hace. Pues no, si no quiero hacer o decir algo, no lo hago y punto, y ese tipo de cosas son las que hacen que cada uno sea diferente del otro, unos más que otros, está claro.

lunes, 16 de julio de 2012

Por si no te has dado cuenta, el verano ya comenzó hace tiempo. 
Agua, sol, playa, sandalias, pelo mojado, piscina, toallas, shorts, gafas de sol, vacaciones, ganas de fiesta. ¿Te suena eso? VERANO. VERANO. VERANO.
Tanto estabas esperando a que acabaran las clases y así poder tener todo el tiempo libre del mundo, y ahora que lo tienes, no haces todas esas cosas que soñabas hacer mientras estabas "atendiendo" en clase. A lo mejor ni te has dado cuenta, pero ya estamos a mitad de Julio, así que si todavía no eres feliz al máximo, no sé a qué esperas, este puede ser tu veranoel inolvidableel mejor de tu vida.

domingo, 15 de julio de 2012

¿Esperamos un año más para que tengas los 18 o nos escapamos ya? Tampoco tenemos mucho que perder, la vida es muy corta, y hay demasiadas ganas de vivir
¿Qué mierda estoy haciendo con mi vida? Hay que disfrutar más, y yo no lo hago, simplemente por el qué dirán mis padres, mis amigas, todo el mundo.
Somos jóvenes, vivamos como se debe. Llamémonos de todo, para después acabar besándonos. Vayamos paseando por la playa para acabar corriendo hacia el agua, sin darle importancia a que vamos con ropa. Esta noche quiero bailar, vamos.

jueves, 12 de julio de 2012

Con el paso del tiempo he aprendido que si no consigues olvidarte de un tío, es porque en el fondo todavía no quieres hacerlo, porque tu subconsciente sigue teniendo esa mínima esperanza, esa que no se suele perder, de que todo vuelva a la normalidad, de que él vuelva, de que volváis. Y ese es el problema. Lo que tienes que hacer es preguntarte: ¿Me ha hecho daño? ¿De verdad me arriesgaría a que volviera a pasar lo mismo sólo por unos cuantos momentos bonitos y baratos con él? Si la primera respuesta es 'Sí', ya sabes lo que tienes que hacer, olvidarle, pero de verdad, porque quien te hace daño es porque no te quiere, y eso es así y punto. 

lunes, 9 de julio de 2012

Cuando quieres a un chico, te parece que todo lo demás no importa, sus sentimientos, sus estados de ánimo son hasta más importantes que los tuyos, tu sonrisa depende de la suya. Si el amor es correspondido, todo te parece perfecto, y si no es correspondido, tu vida se desmorona. Las discusiones con él son lo peor del puto mundo, no te imaginas cosas peores que estar mal con él. Pero lo que no sabes es que no siempre ese chico que tu crees que es perfecto, lo es en realidad. El amor nos hace ver cosas que queremos ver. Y lo que no queremos ni imaginar, una vez que pasan, hacemos como que no han pasado.
Los chicos perfectos no existen. Bueno, casi. Es más importante que te trate como una jodida princesa, a que sea un "tío bueno" y pase de ti como de la mierda, que solo te llame por conveniencia, porque quiere quedar contigo para liarse. He estado perdiendo el tiempo con un tío que no vale la pena, y si lo pienso bien, le quería muchísimo, pero luego lo de quererle se fue a segundo plano, y solo quedaba atracción física, me gustaba, si, pero no le veía futuro, básicamente porque igual que me trataba a mi, trataba a tres, cuatro o hasta seis chicas más, todas igual de ciegas como yo, o simplemente unas guarras que solo buscaban lo mismo que él. 

domingo, 8 de julio de 2012

Cariño, tú sigue con tu vida de mierda, de royos y rayadas, que yo seguiré viviendo la mía, con mis amigas y más feliz que nunca. Tú por tu camino, yo por el mío, y así es como debió de haber sido desde el principio, sin haber pasado por toda esa mierda de discusiones y meses llorando.
Por fin he dejado de amarte, por fin he podido salir de ese pozo sin salida aparente.

lunes, 18 de junio de 2012


Podíamos haberlo tenido todo, nos teníamos el uno al otro, yo te quería. ¿Para qué necesitabas más? Ha pasado mucho tiempo. Ahora hemos intercambiado nuestros papeles. Ahora eres tú el que desea, el que me echa de menos, y yo la que soy feliz, sin ti. Y nunca me podía haber sentido mejor, créeme. Deseaba con todas mis fuerzas que llegara este momento, y por fin ha llegado. Hay pequeñas partículas de amor, esparcidas por el ambiente. Mezclas de un amor que podía haber sido real y duradero, mezclas de un amor pasado, mezclas de un nuevo amor, sin ti. Y vuelvo a repetirte que me siento bien. Nunca me había sentido así. Mi vida, definitivamente, ha cambiado. Ahora que le tengo a él, tú ya has perdido importancia. Uno más. ¿A que jode? Pues lo siento, porque esto va a seguir así. Porque le quiero, y porque ahora quiero vivir mi vida con él, el tiempo que sea, pero con él. 

miércoles, 23 de mayo de 2012

Vans veo, Vans quiero.

lunes, 21 de mayo de 2012

Siempre hay un momento en el que el camino se bifurca, cada uno toma una dirección, pensando que al final los caminos se volverán a unir. Desde tu camino ves a la otra persona cada vez más pequeña, no pasa nada...Estamos hechos el uno para el otro. Al final estará él. Pero al final solo ocurre una cosa, llega el puto invierno, y lo borra todo.

sábado, 19 de mayo de 2012

Te puedes poner cinco capas de ropa, encender la estufa, la chimenea, cerrar las ventanas y meterte en la cama que seguirás teniendo frío, porque no hay nada comparado con el rápido efecto que hace el calor de su cuerpo pegado al tuyo. Ese calor que te inunda y te hace sentir bien, demasiado bien, tanto como para desear quedarte así, apegados en esa postura tan extraña y cómoda, abrazados, juntos, por siempre.

viernes, 18 de mayo de 2012

¿Te gustan los retos, verdad? Entonces a ver si tienes cojones a conseguir conmigo ese 'siempre' del que tantos hablan y tan pocos consiguen. Porque si hay algún reto que tuviera que elegir, el quedarme contigo el resto de mi vida sería mi favorito. Porque si me preguntan qué es lo que más quiero, mi contestación serías tú, tu cuerpo, tus gestos, tus miradas y sonrisas. Tu forma de mirarme y acariciarme, tu forma de hacerme reír, y sentirme la chica más afortunada de todo este jodido mundo. Que si hay algo que me anima, es verte cada mañana. Y si puede ser, cada tarde también. Y que cada día que pasa, te quiero un poco más.

martes, 15 de mayo de 2012

Cuando vuelvas a echarme de menos, que se que lo harás, vuelve, que yo con una sonrisa en la cara te diré: 'TARDE'.

domingo, 13 de mayo de 2012

No te enamores de mí, soy una mala influencia, por ejemplo, te obligaré a besarme todos los días, y te crearé adicción con eso. Te abrazaré tanto que te saldrán agujetas. Te diré, gritaré, susurraré tantos 'te quiero' que te aburrirás de esa frase. Si te atreves y estás de acuerdo con todo eso y más, adelante, enamórate de mí. Eso sí, te puedo asegurar que vale la pena tener esa adicción, tener esas agujetas, y aburrirte de esa frase, porque todas sus consecuencias son mucho mejores. 

miércoles, 9 de mayo de 2012

"Te quiero cuando tienes frío estando a 21º, te quiero cuando tardas una hora para pedir un bocadillo, adoro la arruga que se te forma aquí cuando me miras como si estuviera loco, te quiero cuando después de pasar el día contigo mi ropa huele a tu perfume y quiero que seas tú la última persona con la que hable antes de dormirme por las noches. Y eso no es porque esté solo ni tampoco porque sea nochevieja. He venido aquí esta noche porque cuando te das cuenta de que quieres pasar el resto de tu vida con alguien deseas que el resto de tu vida empiece lo antes posible."

domingo, 6 de mayo de 2012

Cuando menos te lo esperas, ya has pasado un mes entero sin él, y todavía sigues viva. Y luego pasan dos, y tres. A veces piensas en él, pero poco a poco, vas olvidándole, y ya no te sientes tan mal al no tenerle. Dile que se quede con las veces que estuvisteis juntos, y ya verá más tarde lo mucho que te echa de menos. Hubo un tiempo que sentía que le estaba perdiendo, y al final le perdí. Ahora ya es imposible volver a estar como estábamos, imposible. Las palabras lo jodieron todo, sus palabras. Tan dolorosas, tan insensibles, tan jodidas. 



Atrapa los recuerdos.

lunes, 30 de abril de 2012

Cuando mi única preocupación era que mi castillo de arena fuera el mejor, cuando no pensaba en nada, solo hacía mis deberes, mis sumas, restas, multiplicaciones, y divisiones. Cuando aprendí a leer y todo lo que me costó. Cuando las tardes se trataban de estar en el parque jugando con mis amigas, imaginando mil y una historias, cuando los únicos nervios que sentía eran porque no sabía lo que me iba a regalar 'Papá Noel', o qué me iban a regalar por mi cumpleaños. Cuando las únicas penas que sentía era porque no me compraban algo, o no querían jugar conmigo. No esto, nadie me enseñó que la vida se iría complicando, que las sumas y restas se convertirían en ecuaciones, razones trigonométricas y funciones. Que las tardes de juegos con mis amigas se convertirían en tardes estudiando. Que los nervios no solo serían causados por exámenes, sino también por tíos, si, esos niños que me estiraban del pelo y me hacían rabiar cuando era pequeña. Que no me pondría triste porque no me regalaran algo, sino por perder a personas importantes en mi vida, o simplemente que me empiecen a ignorar. No me advirtieron de nada de esto, por eso ahora no paro de tropezar con piedras y más piedras. Lo que daría yo por volver a esa época de felicidad e ignorancia.

miércoles, 25 de abril de 2012


¿Sabes cuál es el problema? Que esto no es una maldita película de amor. Esto es la vida real, o jodes, o te joden. No te hagas ilusiones, como en las películas, él no va a volver y decirte que te ama. Si acaso, te mirará cuando no le mires, con desprecio, y en cuanto sientas su mirada y te gires para verle, la apartará. No te creas nada de lo que te digan, porque hasta el más fiel amigo te puede traicionar. Se van los que más quieres, se quedan los que quieres que desaparezcan. No pretendo hundirte, es más, solo intento hacerte ver, que como todos dicen, la vida es muy puta, y que solo serás feliz si aprendes a follártela. A veces soy pesimista, ¿pero sabes quiénes son los pesimistas? Los pesimistas son optimistas con experiencia. Tarde o temprano te darás cuenta de que cuanto más esperes a que alguien aparezca, más tarde llegará; cuanto más esperes ser feliz, menos lo serás. No esperes nada, esperar duele. 

domingo, 22 de abril de 2012

Se acabó eso de ser una ingenua de mierda, ya no confío en nada ni en nadie. 
Si hay algo que realmente no soporto es que todavía haya tíos que te dejen mal, te hagan daño, te jodan, solo por quedar bien delante de ellos mismos. Y como tengo tanta suerte en la vida, ya me han tocado dos así, de los pocos con los que he estado. A veces parece que sea gafe, pero luego pienso y se que no es ser gafe, es una cosa que yo misma me busco, es como un juego estúpido, que sabes que vas a perder, y lo único que haces es apostar más y más, aun así sabiendo que te estás equivocando, que no estás actuando bien. 
Antes pensaba que valía la pena pasarlo mal después de haber pasado un par de recuerdos bonitos, y baratos, ya que no eran más que mentiras. Pero poco a poco, voy viendo mis estúpidos errores, bastante tarde. 
Puede que haya una posibilidad entre mil, de que te arrepientas de lo que has hecho, de tus actos, cuando no tengas a nadie que me iguale. Pero cuando vengas a mi, y me pidas perdón, que se que no va a ser así, yo no podré perdonarte, no después de esto. Te has pasado, los errores se perdonan, pero de ese nivel, no.
Siempre que me tirabas a ese pozo, volvías más tarde con una escalera, y me sacabas. Volvía a ver el color del cielo, volvía a vivir. Esta vez, no has vuelto, te he estado esperando en este agujero negro, y no has vuelto, lo único que has hecho ha sido dejarme aquí, y tapar la salida con una gran piedra. 
Un minuto de silencio por todo ese tiempo que perdimos juntos, y que no volverá nunca. Un tiempo que has encerrado y abandonado en ese pozo, junto a mi.

viernes, 20 de abril de 2012

Nunca me había sentido así. Ha habido veces que sentía nervios, otras veces sentía rabia, y otras me sentía triste. Pero hoy, hoy siento todo eso junto.
También impotencia y ganas. Impotencia porque no puedo hacer nada para remediarlo, y ganas de ir, acercarme a ti y darte una buena ostia. Pero no soy capaz. Nunca había sentido tanta rabia acumulada. Todo, todo mentira, absolutamente todo. Cada vez que te perdonaba, volvíamos a discutir, y cada vez me hacías más daño, hasta hoy. Ya no puedo estar más rota. Has acabado conmigo, jaque mate. Me has destrozado. Es como si me hubieras matado con tus palabras, cada una más dolorosa que la anterior. Eres una de esas personas que no hacen más que hacer daño. No te mereces nada, ni la más mínima mierda, y mucho menos ser feliz. No te lo mereces, joder. Los que más daño hacen son los que mejor vida tienen. Esto no tiene lógica, mi vida tampoco la tiene, ya no.

domingo, 15 de abril de 2012

Hablemos de merecimientos, de derechos. Hablemos de vosotros, también de ti y de mi, y si me permites, de nosotros, ¿qué te parece?
Ella no te merece, ya que siempre que te tenía o te tiene, no eres lo primero, no eres lo más importante. Discutir está bien, claro que si, pero no cada 5 minutos, ¿no crees? Discutir si, pero lo justo y necesario.
Yo no te merezco, ya que me merezco a alguien mucho mejor, alguien que se preocupe por mi, que cuando me tenga, no se fije en ninguna otra, y todas esas cosas que tú hacías, que hacían que me mereciera a alguien mejor.
¿Y tú? ¿Qué pasa contigo? Tú no me mereces... yo te quiero demasiado, yo creo que la que más lo hace soy yo. Y por eso te lo digo, no te mereces a alguien que te quiera tanto, no, no tanto. Has cometido errores, como todo el mundo, pero es que lo tuyo ya pasa la barrera de lo normal, ¿es que acaso no lo ves? ¿es que acaso no sabes lo que quieres o qué te pasa? Esto es raro, eres raro. Y yo más, por quererte.

sábado, 14 de abril de 2012

No te necesito. Ya no tiemblo en cuanto me tocas. Ya no lloro por ti. Ya no pienso en ti a todas horas, solo cuando pronuncian tu nombre y nada más. Cuando te veo, te saludo y a continuación sigo mi camino. Otro a ocupado tu lugar, él me sabe apreciar, me sabe valorar, hace que me sienta como una princesa. Ahora son sus besos los que me enamoran, sus palabras las que me encantan, sus sonrisas las más importantes. Él es todo lo que tú no fuiste, hace todo lo que tú no hiciste, y lo hace de tal manera que mis problemas se esfuman, que todo lo mal que lo pasé contigo, lo mierda que me sentía, lo mal que me tratabas, hace que me olvide de todo eso. Lástima que todo esto sea mentira, y todavía no lo pueda decir sin mentir.

jueves, 12 de abril de 2012

No hagas nada. Siéntate a mi lado, en silencio. No, no digas nada. Sé que a ti el silencio te incomoda, todo lo contrario que a mi, pero por favor, no hables. Yo, totalmente opuesta a ti, prefiero quedarme tumbada encima tuya, cerrar los ojos, y escuchar los lentos latidos de tu corazón.—Vale, intento respirar tranquilamente, como haces tú. Te miro, me miras. Tu mirada expresa incomodidad, y un cierto toque de curiosidad. Me indicas con la mirada que continúe.—Se que no soy lo que buscas, que te va otro royo de tías, lo sé, créeme. Más habladoras, más atrevidas.—Bajo la mirada y los hombros, ya se me han quitado las ganas de hablar. Te acercas un poco más, me coges la mano y me la apretas. Vuelvo a levantar la mirada, y veo que tienes una suave sonrisa en la cara. Eso me anima un poco.—Lo que quería decirte es que no te obligo a que sigas viéndome, tírame de tu casa, dime que tienes cosas que hacer, que tu madre va a volver pronto, dímelo, no pasa nada, lo entenderé, ya estoy acostumbrada a este tipo de cosas. Lo último que quiero hacer es que pierdas tu tiempo con alguien que no mereces, con alguien que te aburre. No se si me entiendes. Tal vez llevemos demasiado tiempo viéndonos, pero te prometo que la única causa por la que sigo quedando contigo es porque te necesito, necesito tus abrazos, tus labios, y bueno, te necesito a ti en general.—Bajé la mirada, avergonzada. Vale, ya lo había dicho. Ahora vete, venga. Me levanto lentamente, y aparto mi mano de la suya, que todavía tenía agarrada. Y en silencio, paso por su oscuro pasillo de casa, hacia la puerta de salida. No me sigue. No me sigue. Ya se ha desecho de mi. Abro la puerta, me meto en el ascensor y apreto el botón B. Y es entonces cuando rompo a llorar, le doy un puñetazo al ascensor, y hace un ruido raro. Ya estoy abajo, pero no me apetece abrir la puerta. Me deslizo hacia abajo, y vuelvo a llorar. Venga tonta, levántate, sécate las lágrimas y sal de ahí de una maldita vez. Eso hago. Abro la puerta del ascensor, y de repente alguien me coge de la muñeca y me tira hacia atrás. No grito, ya que reconozco esas cosquillas en mi piel. Tengo la mirada en nuestros pies, y él me sube la cabeza hasta quedar el uno delante del otro, a pocos centímetros.—Venga tonta, sube a mi casa, anda, y que sea la última vez que dices esas tonterías ¿de acuerdo? Y no llores, por favor, no llores por mi, es lo último que quiero que hagas. Si alguna vez te hago daño, me odiaré por siempre, eso ni lo dudes.—Me coge la mano, esas cosquillas, esos escalofríos tan fantásticos no los cambiaría por nada del mundo. Y por primera vez en todo el día, sonrío. 
Todavía pienso en ti todas las noches, todavía cuando cierro los ojos siento tu mano recorriendo mi piel. Todavía necesito sentir tu respiración en mi boca, ver tus ojos a escasos milímetros de los míos. Todavía necesito ver tu sonrisa para poder sonreír yo también. Todavía sueño contigo y con tus abrazos. Todavía no lo he superado, todavía espero a que vuelvas, y pasan los días, y cada vez que no te veo, me olvido un poquito de ti, una cosa mínima, que si hubieras desaparecido completamente de mi vida, te habrías convertido en el más precioso recuerdo; pero no, te voy a seguir viendo, durante mucho tiempo, y eso dificulta el proceso de olvido.

martes, 10 de abril de 2012

Porque imbéciles hay muchos, ¿pero como él? NINGUNO.
Él es un chulo que se le ha subido la chulería a la cabeza porque tiene a casi todas las que quiera detrás. Porque se cree que es el mejor en todo, y en realidad no hace más que cagarla. Porque solo piensa en si mismo, en pasarlo bien, divertirse, no piensa en lo que pasará por la mañana. Porque él no piensa en los corazones rotos que deja por el camino, solo importa él. Porque es el que mejor anda, habla, juega a fútbol, baila...
¿Te mira? Enamorada. ¿Te abraza? Enamorada. ¿Te sonríe? Enamorada. ¿Te besa? Perdídamente enamorada. Así es como funciona, como funcionas tú con él cerca. No hay remedio.

Y a pesar de lo imbécil, cabrón, creído que es, yo estoy aquí contando sus defectos, mientras cada vez me enamoro más. Y no me queda más remedio que pensar si acaso la imbécil no soy yo, o es que esto es normal, que me temo que no.

domingo, 8 de abril de 2012

¿Lo más triste que conozco? Cuando se acaba el amor. Cuando ya no sientes las mismas cosquillas que sentías antes; cuando ya no sonríes en cuanto escuchas su voz, oyes su nombre; cuando os abrazáis y ya no te sientes tan a salvo como lo hacías antes. Cuando el amor se vuelve una rutina, ya no hay mucho más que hacer. Hay que afrontarlo, aceptarlo. ¿Duele? Por supuesto. Por eso no hay que caer en la rutina, ya lo sé, es fácil decirlo, pero hay que hacer un esfuerzo por intentarlo.
Tenerte a tres metros y distinguirte sin ninguna duda. 
Tenerte a dos metros y medio y ver tu sonrisa y sin darme cuenta ya tener yo una en la cara. 
Tenerte a dos metros y ponerme a temblar y a reírme sin ningún motivo. 
Tenerte a metro y medio y mirarte disimuladamente sin que te des cuenta. 
Tenerte a un metro y echar a correr hacia ti.
Tenerte a medio metro y pararme en seco para acercarme despacio. 
Tenerte a unos pocos centímetros y no ser capaz de abrazarte y decirte lo que te quiero.

Fuente: http://www.californiandoll.blogspot.com.es/
¿Sabías que tus besos han creado cierta adicción en mi? Si, algo así como un vicio, como eso de fumar tabaco, o cualquier otro de menor importancia. Eso no es bueno. Antes, cuando te tenía era perfecto, ¿pero ahora? Ahora que ya no estás, ¿qué? Es lo mismo que con el tabaco, todo perfecto hasta que se te acaba la paga o tienes un cáncer de pulmón. Tendré que desintoxicarme de alguna forma...todavía no han inventado ni parches ni nada parecido, ¿no? Entonces tendré que utilizar eso que se llama tiempo, mucho tiempo. Me va a costar, que lo sepas, porque estoy obsesionada hasta tal punto que si cierro los ojos y me concentro un poco, todavía puedo sentir tus labios sobre los míos. 

viernes, 6 de abril de 2012

Solo quiere bailar, una noche más. Ella siempre fue diferente de todas las demás. Su vida no fue fácil, pero nada pudo parar. Fiel amiga, ella es sincera, ella te sabe amar, y se pasa la noche bailando, bailando, bailando.
En la discoteca, hace lo que quiera, nadie la controla, ella está soltera, le gusta la fiesta, el ritmo la lleva, trata de vivir la vida a su manera.
Un día de repente cambió y ahora no cree en el amor, de todo tuvo la culpa el hombre que rompió su corazón.Ya no busca su príncipe azul que de niña soñó porque ella...solo quiere bailar, una noche más, solo quiere bailar, una noche más.
No, niña tu puedes, no pierdas el control, que le jodan a ese hombre, no te amó, que la vida sigue. 
Vive, vive, que la vida no se pare y sigue, sigue, si le ves acércate, y dile, dile que sin él estás mejor, que ya no quieres su amor, que de ti se olvide.

http://www.youtube.com/watch?v=Sjeglqk8X9U
Mis labios se han vuelto desobedientes desde que te has ido, y eso que hace ya muchísimo tiempo que desapareciste de mi vida. Yo intento volver a encontrar a alguien a quien amar, alguien que se pueda igualar a ti, o incluso superarte, pero cada vez que mis labios se juntan con ese alguien, NO CONSIGO SENTIR NADA, absolutamente nada. Ni una mariposa fugitiva, ni un mínimo escalofrío. Tal vez no sea culpa de mis labios, tal vez sea culpa de los tuyos, que enamoraron a los míos hasta el punto de que ahora se niegan a sentir y besar bien a otros que no sean los tuyos.

lunes, 26 de marzo de 2012

Dime algo. Dime 'hola' o dime lo que quieras. Cuéntame lo que has echo hoy, lo que quieres hacer en el futuro o simplemente cuéntame lo que has comido hoy. Cuéntame un cuento, o un chiste, como prefieras. Cuéntame todas tus historias de amores y desamores, tus líos y tus peleas. Dime qué te parece como voy hoy vestida, si te gusta que lleve el pelo suelto, o mejor recogido. Dime qué es lo que más te gusta hacer. Dime la primera cosa que se te ocurra desde ahora, o mejor dime la última. Dime en qué piensas cuando pronuncian mi nombre. Dime qué es lo que sueñas, dime en qué es lo que piensas cuando te desconectas en clase, cuando tienes esa mirada tuya tan perdida, dime que estás en un pozo de tristezas. O mejor haz una cosa, miénteme, dime que lo único que sueñas es un nosotros, que cuando estás así de pensativo, es porque no sabes qué hacer para tenerme, dime que lo único que quieres para tu futuro, es que yo esté en él, que el pelo te da igual como lo lleve, que siempre te gusta como voy vestida, aunque me preferirías sin nada. Dime que quieres que te rescate de ese pozo, dime que me quieres, o dime que todo eso que acabas de decir no es una mentira, como yo pienso, sino que es justamente lo que querías decirme, pero no sabías cómo. Eso sí, cuando acabes de contármelo, avísame que has acabado, y si lo que acabas de contar está basado en echos reales o es solo más que una gran mentira.

domingo, 25 de marzo de 2012


Ella está sentada en esa arena, con los pies mojados, aparentemente contemplando el mar. Pero nadie sabe que ella en lo que menos está, es con la mirada en el mar. Ama esa playa casi desierta. Lleva su música puesta, con el mp4 en la mano derecha, una canción movidita invade sus oídos, hace que mueva suavemente su cabeza, de un lado a otro.
Esa tarde necesitaba desconectar del mundo, demasiadas emociones juntas. Estaba en lo suyo, pensando en qué era lo que había sucedido esa tarde. Lo que ella había intentado durante tanto tiempo, y había logrado, se vió hecho mierda, en cuestión de minutos. Ella intentaba ser fuerte, y en cierto modo, lo había conseguido. Solo quería pasárselo bien, ya no buscaba el amor, solo el romance de una noche. ¿Y por qué? No quería volver a pasarlo mal, nunca. Él la había destrozado, hasta el extremo de no querer seguir viviendo.
Esa tarde, habían pasado demasiadas cosas para que su frágil corazón pudiera superar, y seguir latiendo de esa forma tan tranquila, no, ya no podía, a partir de esa tarde, ya no latía tranquilamente, esa tarde parecía que se le iba a salir del pecho, a pesar de lo tranquilamente sentada que estaba.
Todavía se acordaba de todos los detalles. Sus miradas, se cruzaron por primera vez en casi más de un mes y medio. Como un relámpago, una descarga eléctrica pasó por su cuerpo. Ya no era la chica fuerte que había conseguido ser desde que él desapareció de su vida. Se quedó sin aire, sus ojos se abrieron desmesuradamente, y cuando por fin consiguió volver a respirar, por su boca salió un gran suspiro, tan fuerte, que hasta ella misma se asustó. Ya no era fuerte. Ahora era la chica más débil que conocía. Él en cambio, al ver su cara, una sonrisa triumfadora apareció en su rostro. Y como quien no quiere la cosa, hizo eso que no debía haber echo. Le guiñó el ojo, y una sonrisa burlona apareció en su cara. Todavía recuerda como salió de esa clase, para seguidamente ir corriendo al baño, cerrar la puerta de un portazo y romper a llorar.
Ahora estaba sentada ahí, en esa playa que tanto habían frecuentado juntos, y como para mejorar la situación, una canción lenta, y triste comenzó a sonar en su mp4, y ella no pudo evitar volver a llorar. Ya no era fuerte, no lo era, por mucho que lo intentara, ya no lo era.

lunes, 20 de febrero de 2012

Que los malos son muy malos, y los buenos, no tan buenos. Las palabras son inversamente proporcionales a lo que queremos decir. Los besos se agotan. La esperanza desespera. El pasado duele, pero no siempre. Los sueños siempre llegan con retraso. Los sentimientos se confunden. Que no todas las guapas son unas guarras y las feas son las buenas. No todas las gordas quieren estar flacas ni todas las flacas estan contentas con su peso. Que las palabras de las lleva el viento, pero siempre hay alguna que otra que se queda zumbando en tu cabeza y no te deja en paz. Que es dificil ser tú mismo en esta mierda sociedad.
Sueños rotos. Promesas inútiles. Desilusiones. Corazón vacío.

domingo, 19 de febrero de 2012

¿Sabes? Hoy me apetece salir...
Mmmm...está bien, iremos primero al cielo, y despues al infierno.
¿Qué dices?
Digo que si tu lo deseas prometo subirte al cielo con miles de te quieros, palabras bonitas, susurros al oído, locuras, sonrisas, besos... pero cuando vean que entre todos los susurros hay miradas de complicidad, que todas las palabras bonitas conducen a algo más, que las locuras llevan a que nuestros labios se rocen, se junten, cuando presencien nuestras caricias y se den cuenta de que las sonrisas tienen segundas intenciones nos mandarán derechos al infierno, sin paradas de por medio.
Bueno, en ese caso, ¿cuando salimos?



Fuente: http://buenosdiasmidulceprincesa.blogspot.com/

martes, 7 de febrero de 2012


¿Ves este chico de aquí?
Para muchos es Justin Bieber. Para unos es el gay, el creído, el idiota, y muchas cosas más. Para otros, puede que sea un chico normal y corriente, uno del montón, porque ni siquiera lo conocen. Para unos puede ser un chico guapo, y para otros horrible. Para mí, és mi ídolo. Mi inspiración, un ejemplo a seguir, una preciosidad, y muchísimas cosas más. Y es que no sabéis lo dificil que es apoyarlo, que la gente te trate diferente solo porque te guste, o porque sea tu ídolo. No lo sabéis, y nunca lo sabréis. La gente es una banda de ignorantes, que juzgan a las personas sin tan siquiera molestarse por conocer su vida, su pasado. Juzgan, juzgan y no paran de juzgar e insultar. No porque me guste Justin soy una inmadura, una niñata, una tonta, una friki, y todas esas cosas que me llamáis solo por apoyarlo. NO. 
Y diréis que no es envidia, que es asco, y todas esas cosas. Pues vale. Me da igual, pero mientras tú lo estas insultando y perdiendo TU TIEMPO en hacerlo, yo me río de ti. Si, así de claro. Es penoso, simplemente eso. No me conoces, no LE conoces, no sabes por lo que ha pasado cuando era pequeño, la pobreza, el hambre, no tenía una puta cama en donde dormir, ¿y ahora? Lo criticais e insultais por cumplir su sueño, que se lo ha ganado por nada más y nada menos que su talento y esfuerzo. 


 
¿Qué otro famoso se preocupa tanto por sus fans? ¿Qué otro famoso hace tantísimo por la gente menos afortunada? Esto último tal vez muchos, pero no todos lo hacen de corazón, ÉL SI. Él se emociona cada vez que hace feliz a una persona, cada vez que puede ayudar en algo. 
ÉL SIGUE SIENDO HUMILDE, a pesar de todo.



Él es la razón por la que muchas veces sonrío.  


Su voz. Es preciosa, a pesar de todo lo que digan, por mucho que digan que canta como una tía, que su voz está siempre retocada, no cambiará el echo de que canta perfecto. Primero, ¿acaso has escuchado más canciones que no sean las que salen en su primer disco, de cuando tenia 15-16 años? ¿No? Porque si las escucharas cambiarías de opinión en cuanto a voz de tía. ¿Y que siempre canta playback? ¿Tu has visto sus conciertos? ¿Todos esos directos que hace en la televisión? Es uno de los pocos cantantes que cantan MUY BIEN en directo, sin retoques, sin falsedad. Cada vez que le escucho cantando, me pasan millones de escalofríos, su voz es preciosa, a pesar de todos los cambios que ha sufrido. Porque si, él en el fondo sigue siendo el niño de Baby, pero mayor, ha crecido, ha madurado, ha cambiado, pero en el fondo sigue siendo él, Kidrauhl.  

¿Y por útimo, ves esa sonrisa? Esa sonrisa es la que hace que todas sus fans, y las Beliebers, estemos orgullosas de él, que creamos que nada es imposible, él nos enseñó a nunca decir nunca, a creer. Siento que aunque cambie, siempre me acordaré de él, y lo apoyaré. Por algo soy Belieber. 
 

martes, 31 de enero de 2012

"«Adiós.
Bueno, pues como dice el título, vengo a despedirme. Han sido unos años maravillosos, y estando a tu lado muchísimo mejores. No te olvidarás de mi, ¿verdad? :), de todas nuestras risas, tonterías y demás...Todo eso es inolvidable, o al menos para mi. Te acordarás de esos momentos, ¿no? ♥
Bueno que más...Te quiero mucho :) Eso nunca, pero nunca lo olvides, ¿vale? :')
Te amo, siempre lo haré. Fuiste y serás ALUCINANTE. No llores por gilipollas y mucho menos por alguien que no se lo merece. Porque tú, tampoco te mereces estar mal por esa...cosa. Te entiendo cuando dices que es imposible no hacerle caso y eso, porque si de verdad le quieres, haces lo que te pide (yo también lo haría) pero solo te pido que no estés mal, por favor. Porque si tu estás mal, yo tambien :( y no me gusta verte así. Bueno, no se que más decirte, solo quiero que sepas que aunque estés lejos, te seguiré queriendo. Porque ¿como tú? Muy pocas :)»
(Todo esto te lo diría si te fueras a Polonia para siempre.) Me daría mucha pena, ¿sabes? Bueno, aunque todo esto haya sido una caca, quiero que sepas que te quiero. Te doy las gracias por todo. Gracias por aceptarme como tu mejor amiga. Y sobre todo, gracias por ser así. Por ayudarme en todo lo que necesito. GRACIAS♥
                                                                                                   De tu amiga Laura."

Joder, en serio, te amo tanto... Yo tampoco se qué haría sin ti, amor. Las gracias te las doy yo a ti, porque si no te hubiera conocido, sería otra persona, otra persona más mierda, tú me haces mejor de lo que en realidad podría haber sido. Gracias a ti, por todo, por esos momentos, esas lágrimas de felicidad y esas risas. Te amo, yo tampoco te olvidaría cielo, nunca, eso ni lo dudes, te quiero demasiado como para que pudiera pasar eso. Siempre, aunque no físicamente, ya que la distancia es una jodida mierda y puede sorprendernos cualquier día, al menos en el corazón. Te quiero.

sábado, 21 de enero de 2012

Y todos los días un poco, no puedo evitar hacerme esas preguntas, que me atormentan. Así que allá voy.
¿Qué habría pasado si él no hubiera repetido curso?
¿Qué habría pasado si no me hubiera pedido que le ayudara en esa lámina de plástica?
¿Qué habría pasado si yo me hubiera negado a ir a su casa para ayudarle?
¿Qué habría pasado si cuando el me hubiera preguntado eso, le hubiera contestado que no?
¿Qué habría pasado si no hubiera quedado más veces con él?
¿Qué habría pasado si todas esas veces que me enfadaba con él, no lo hubieramos arreglado?
¿Qué habría pasado si comenzara a pasar de él, y no al contrario?
¿Qué habría pasado si hubiera dado un paso más en todo eso?
¿Qué habría pasado? Todo sería diferente, totalmente, él viviría su vida, y yo la mía, sin habernos conocido jamás, sin todos esos sufrimientos. A veces hubiera preferido no haberlo conocido, pero luego pienso en todos los momentos pasados con él, y me doy cuenta, de que vale la pena pasarlo mal, habiendo pasado todo eso con él; de que aunque ahora ni nos miremos, se que él tambien se acordará de todo eso y me basta. Se que puedo decirle sinceramente que lo amé de verdad, como no me pasó nunca con nadie.
Mentiras. Una detrás de otra. Eso es lo que hacías en cuanto abrías la boca. Y yo, una ingénua de mierda, te las creí TODAS. Promesas inútiles, sueños imposibles de cumplir, mentiras, dolor, vacío. Así es como me siento; sola en medio de un montón de gente, algunos que me quieren, otros que me odian, otros que me admiran y otros que me desprecian, pero al fin y al cabo, gente.
Y yo no puedo reprimir esa sensación de olvido, de desesperación, de tristeza y soledad. Ya no sale ninguna sonrisa verdadera de mi rostro, todo es falsedad, para que la gente no se preocupe, porque...Si me preguntan, ¿qué contestaría? Olvídalo, estoy enamorada. Y dirían...¿Y eso que tiene de malo? Pues que si no eres correspondido, o si te han traicionado el corazón, es lo peor del mundo. 

martes, 17 de enero de 2012

E L   A M O R   E S   I R R A C I O N A L.
Una cosa es e s t a r feliz en un momento dado, y otra muy diferente, s e r feliz.
Me dije que no, con tristeza, y me recordé a mí misma que el amor es irracional. Cuanto más quieres a alguien, menos lógica tiene todo.
Me arrepiento muchísimo no haber hecho ciertas cosas, debí haberlas hecho cuando podía, pero no es mi culpa, o tal vez si, no pensar en el futuro, sino solo en el presente, porque pienso que ese algo va a repetirse más veces, sin embargo, más tarde me doy cuenta de que nunca más tendré ocasión de hacer eso que tanto quería. Arriesgué demasiado, pensando en que volvería a pasar, como las otras muchas veces, pero esta vez me equivoqué, y no voy a tener ocasión de arreglar ese fallo. Es desesperante la sensación de decepción, agonía y dolor.

miércoles, 11 de enero de 2012

Siento que he cambiado. Que he madurado, aunque sea un poco. Ya no me hacen ilusión ni la mitad de cosas que hace un año me hacían. Cuando veo unos columpios, ya no me tiro hacia ellos como una posesa, ya no me hacen gracia las mismas cosas, tengo miedo, si. No quiero crecer, quiero quedarme estancada con esta edad, dicen que a los 15 es cuando mejor te lo pasas, que es una edad muy buena y esas cosas, ¿entonces para qué crecer más? ¿Para que me dejen de hacer gracia aún más cosas? ¿Para que ya no me ilusione casi ninguna tonteria? No gracias. Prefiero ser una adolescente de 15 años, porque si con 15 años tengo todos estos problemas, ya ni me imagino con 16 o 17. Simplemente no quiero tener que tomar más decisiones, esto me cansa. Quiero volver a reirme por tonterías, y así poder corregir los errores que estoy cometiendo ahora.

martes, 10 de enero de 2012

Y una vez más he roto mi promesa. Creía que ya no la iba a romper nunca más, pensaba que podía cumplirla, pero hoy acabo de ver que no era verdad. Una vez empecé a pensar en ti, en todos los momentos compartidos, no pude más que soltar un llanto y romper a llorar, cada vez iba en aumento a medida que recordaba más y más cosas. Yo no puedo decir que soy una persona fuerte; no, no lo soy, soy demasiado débil; yo no puedo decir que de tanto tiempo siendo fuerte, tenía que acabar llorando, no. Yo no soy así, soy demasiado sensible, fallo mío.



Lo que más me duele de todo esto, no es que echo de menos tus besos, aunque tengo que admitir que si que lo hago, pero lo que más me duele aún, es recordar esa tarde. No la última que estuve contigo, sino la anterior, cuando estábamos en tu casa, haciendo como que hacíamos los deberes de Francés, esperando a que tu madre se fuera, me acuerdo muy bien de ese día, y dudo que lo pueda olvidar; cuando tardaba tanto en irse, y empezábamos a ponernos nerviosos, tú cagándote en la puta, y yo riéndome, luego cuando empezamos a escribirnos notitas en la misma hoja de deberes, preguntando si se iba a ir por fin o no, me pregunto que habrá sido de esa hoja; cuando por fin dijo que se iba, pero al final no, y tu empezando a contestarle, y yo estaba ahi haciéndote señas para que pararas, dandote patadas por debajo de la mesa, o cuando te pusistes a mi lado esa tarde, y me distes la mano por debajo de la mesa, una estampida de mariposas pasó por mi estómago, nos sonreímos mutuamente, y yo estaba en la gloria. Me duele muchísimo, no sabes cuanto, pensar que cuando hacías todo eso, no sentías NADA por mi, ni un poco, estoy segura de ello. 
No echaré tanto de menos los recuerdos de tus besos, recordaré con dolor cuando me cogías y acariciabas la mano, o cuando me abrazabas, cuando creía que al menos te gustaba un poco. Esto no son más que recuerdos, recuerdos de cuando era feliz, muy feliz; dudo mucho que vuelva a sentir algo parecido pronto, pasará mucho tiempo hasta que lo consiga, esa felicidad plena. Es triste, mucho.





domingo, 8 de enero de 2012

El tiempo pasa incluso aunque parezca imposible, incluso a pesar de que cada movimiento de la manecilla del reloj duela como el latido de la sangre al palpitar detrás de un cardenal. El tiempo transcurre de forma desigual, con saltos extraños y treguas insoportables, pero pasar, pasa. Incluso para mi.

sábado, 7 de enero de 2012

Yeah
Llegó la hora de disfrutar. Se acabó el sufrimiento, las dudas, las horas llorando por alguien que no se lo merece, por alguien que nunca lloraría por tí, que ni siquiera pensaría en hacerlo
Sonríe; que vea que no dependes de él, que no le necesitas para ser feliz. Salta, baila, canta, corre, ríe, abraza, besa. Se feliz. Si hace falta, haz alguna tontería, alguna locura, y no pienses demasiado en lo que vayan a pensar los demás. 
Solo importa tu felicidad, es la única que está en juego, asi que ni te lo pienses dos veces, y haz todo eso que siempre quisiste hacer.
Cuando pases al lado de esa guarra que tanta rabia le tienes, guiñale el ojo y suelta una carcajada, que vea lo feliz que eres; abraza a tus amigas, que se queden sin aire; cuando estés feliz, salta y grita. 
Piensa que todos piensan en si mismos, asi que haz tu lo mismo contigo misma, tú por delante de todo y de todos.
—Me gustaría pedirte un favor, a pesar de todo, si no es demasiado— dijo.
Me pregunté qué vería en mi rostro para que el suyo se descompusiera al mirarme, pero logró controlar las facciones y recuperar la máscara de serenidad antes de que yo fuera capaz de descubrirlo.
—Lo que quieras— prometí, con la voz ligeramente más fuerte.
Sus ojos helados se derritieron mientras le miraba con una intensidad sobrecogedora.
—No hagas nada desesperado o estúpido— me ordenó sin mostrarse distante—¿Entiendes lo que te digo?
Asentí sin fuerzas.
Sus ojos se enfriaron y volvió a mostrarse distante.
—Te haré una promesa a cambio— dijo— Te garantizo que no volverás a verme. No regresaré ni volveré a hacerte pasar por todo esto. Podrás retomar tu vida sin que yo interfiera para nada. Será como si nunca hubiese existido. 

viernes, 6 de enero de 2012



Simplemente me he cansado de ser la tonta en esta historia. Ya no voy a permitir que juegues conmigo de esa forma. Por mucho que me duela, lo conseguiré. Estos días que se avecinan van a ser difíciles; sufriré, si; lloraré, tambien; pero al final lo conseguiré, podré decir tranquilamente y con una sonrisa en la cara que te he olvidado, que ya no siento absolutamente nada por ti; cuando te mire a la cara, no me perderé ni en tus ojos, ni en tu sonrisa preciosa; no, no lo haré, serás uno más del montón, no el único, como ahora. Simplemente habrás perdido a una gilipollas que iba detrás tuya, que en cuanto decías de quedar, iba. Se acabará todo esto, cariño. Y puede que hasta llegue un momento en que te arrepientas de ser tan capullo, me mires y empieces a sentir cosas por mi, esas mismas que yo he estado sintiendo por ti durante casi un año entero hasta ahora; te dolerá saber que lo que por ti siento es una total indiferencia, ahora no, pero en un tiempo si. Ahora me importas demasiado, pero lo conseguiré, ya verás. Tus palabras me duelen demasiado, y las últimas que pronunciaste más aún, me entran ganas de llorar, de gritar, y finalmente de ir dondequiera que estés y pegarte un par de ostias bien dadas, pero bueno, al menos ya me he desahogado con todo lo que pienso sobre ti en ese mensaje privado, ya me da igual que no me lo contestes, que hayan pasado exactamente 3 días desde que te lo escribí, aunque me jode tu indiferencia, muchisimo, si tanto te importara como tu decías hace unos días, me escribirías aunque sea un lo siento, una puta excusa, algo. Pero una vez más me has dado a entender que todo eso de que te importaba solo eran excusas para liarte conmigo, de que te importaba y esas mierdas, simplemente, ya paso de ti. 
¿Sabes el problema de todo esto? Que en cuanto pase el puto umbral de la puerta de clase, y te vea, toda esa fuerza, todas esas decisiones que estoy tomando ahora, se irán, como un suspiro, como un beso, a la mierda. Pero te juro que esta vez seré fuerte, olvidarte, borrarte de mi vida será lo más dificil que he hecho jamás en mi vida, pero las conseqüencias valdrán la pena, ya no tendré miedo de que al besar a otro, tenga tu cara en mi mente, ni que al pensar en el otro, me lo imagine con tu cuerpo y tu cara. Valdrá la pena, ya verás.